Era un secreto a voces que Lali Salas volvería a la política tras su renuncia como concejala de Ciudadanos en abril del pasado año. La duda era saber en qué partido, ya que sus postulados radicales tenían encaje tanto en el Partido Popular como en la ultraderecha de Vox. Finalmente ha sido el PP quien la ha incorporado a sus filas para formar parte de la candidatura a las elecciones municipales de 2023.
Salas, que renunció a su acta en el Ayuntamiento alegando “imposibilidad de poder ejercer debidamente y con el rigor requerido su responsabilidad política con el pueblo de Alhama” evidencia ahora que aquel argumento era mentira y una excusa para abandonar la formación naranja ante su inminente desaparición del mapa político local y nacional. Este fichaje demuestra que la exconcejala solo busca su acomodo e interés personal, muy lejos del interés de los 22.000 alhameños y alhameñas.
El secretario general del PSOE de Alhama, Antonio García, ha valorado este anuncio: “Está marcada, todo el mundo la conoce. Durante su etapa como concejala demostró su total incapacidad para hacer propuestas, llegar a acuerdos y atender las necesidades de los vecinos”.
Además, durante la pandemia han sido continuas las salidas de tono de la exedil en medios y redes sociales, arremetiendo continuamente contra el equipo de Gobierno y tratando de torpedear cualquier iniciativa desde su puesto de trabajo en unos momentos tan graves como han sido las distintas olas que hemos sufrido.
El PP local sigue dando muestras preocupantes de su desorientación y falta de personal para conformar una candidatura, dejando de lado a sus afiliados y apostando por el perfil de esta señora que protagonizó uno de los momentos más bochornosos de la actual legislatura cuando afirmó en el Pleno que el concejal de Festejos no estaba capacitado para organizar la Feria porque no había nacido en Alhama.
