Artículo de Nani Navarro, candidata al Congreso por el PSRM-PSOE, para Infolínea.es
El pasado 24 de junio se celebró el día grande de la Semana del Orgullo en la plaza del Cardenal Belluga, en Murcia, al igual que en otros muchos municipios de nuestro país. Algo que surge por la necesidad que sigue existiendo en nuestra sociedad de luchar por la libertad, la igualdad y los derechos del colectivo LGTBI+. Fue un día de visibilización, en el que se realizaron distintas actividades para continuar reivindicando la diversidad, la libertad y derechos que nos asisten a todos y todas. O que deberían asistirnos, porque está claro que no es así.
Durante el concierto ocurrió algo bochornoso y que atenta contra los derechos y libertad de expresión de cualquier persona. El acto fue detenido cuando la cantante Rocío Saiz, se quitó la camiseta en la canción ‘Como yo te amo’, cuando es algo que lleva haciendo la artista desde hace más de 10 años. Se pidió a la organización que se paralizase el concierto, que no fue reanudado hasta que la cantante si vistió. ¿Hubiera ocurrido igual si el que muestra su torso es un hombre?
Esto me hace recordar otros momentos vividos por nuestra sociedad, como cuando se aprobó la Ley del matrimonio igualitario durante el gobierno de Zapatero y contra la que el PP no solo lo voto en contra, sino que presento un recuso al Tribunal Constitucional.
También es bueno traer a colación otro hecho que no es tan lejano en el tiempo, como fue la petición del Parlamento Europeo para que un matrimonio igualitario en España sea reconocido automáticamente en Polonia y que dos mujeres madres sean reconocidas como tales en Hungría, cuya resolución fue aprobada, pero con la abstención de los Populares y el voto en contra de Vox.
Ya está bien de mentiras de la derecha y de ponerse en contra de los avances sociales. Pero también de su hipocresía, porque luego no les da pudor asumir estos cambios cuando ya están instaurados.
Estamos viviendo una momento bochornoso, en el que vemos cómo el PP se echa en brazos de la ultraderecha con la única intención de gobernar a toda costa allá donde les dan los números para ello. En nuestra Región lo sabemos bien, puesto que fuimos unos de los primeros laboratorios que utilizo el PP para sus experimentos, como por ejemplo dejando en manos de Mabel Campuzano -tránsfuga de Vox- la consejería de Educación y Cultura, y su ‘Pin Parental’. Además, lo hacen sin importarles lo más mínimo las consecuencias que tienen estas cesiones, siendo una de las principales áreas afectadas la de Igualdad, con continuas mentiras y manipulaciones sobre su razón de ser.
Tras el 28M, el Partido Popular asume como propias las propuestas de Vox en ayuntamientos, capitales de provincia y gobiernos autonómicos, lo que está suponiendo ya un retroceso histórico en los derechos de las mujeres y del colectivo LGTBIQ+.
Este 23J nos jugamos mucho más de lo que pensamos. No cometamos el mismo error de hace dos meses, porque entonces ya no habrá solución posible.
