Artículo de Nuria García para Siete Días Alhama
Los socialistas pensamos que el bienestar de las personas siempre ha de ser la prioridad de la actividad política. Además, resulta fundamental para salir de esta crisis sin una mayor desigualdad, sobre todo para nuestros mayores y personas dependientes.
Es un hecho incuestionable el que nuestro sistema sanitario durante estos meses de pandemia ha estado a punto del colapso, entre otras cuestiones motivado por los años de recortes en muchos sectores, pero especialmente en sanidad y servicios sociales. Esta situación afecta a la calidad de vida y a la vida misma de las personas, esto es algo que los socialistas consideramos inasumible en la sociedad actual, y mucho más cuando se disponen de medios para solucionarlo.
Bajo el principio de que la salud es lo primero, hace unos días nuestro secretario general, Diego Conesa, presentaba la propuesta de un plan urgente basado en el bienestar de las personas y en el refuerzo de la sanidad pública regional. La propuesta que el grupo parlamentario socialista ha hecho a los demás partidos es fruto del trabajo de muchos meses y de los contactos mantenidos con profesionales de la sanidad y de los servicios sociales, donde se han recogido las principales necesidades para poder poner a punto nuestro sistema sociosanitario.
El texto está basado en los cinco ejes fundamentales que se necesitan para garantizar el bienestar y la salud de todos. Comenzando por el necesario aumento de plazas y la estabilidad de los profesionales, así como un plan de choque de las infraestructuras sanitarias y de atención primaria.
Es fundamental transformar el modelo residencial de atención a las personas mayores y dependientes. También lo es ampliar el parque público de vivienda social para poder atender a las familias vulnerables que se han visto afectadas por la crisis de la pandemia. Y, por último, para que nadie se quede atrás en el momento de la recuperación, el plan propone complementar la renta básica regional con el ingreso mínimo vital del Estado para erradicar la pobreza.
Unas propuestas que son necesarias que nunca. El gran despliegue de fondos de la Unión Europea y del Gobierno de España, destinados a reforzar el sistema sanitario, nos ofrecen una oportunidad histórica para modernizar y adaptar el modelo de atención sociosanitaria, preparándolo para futuras pandemias y haciéndolo mucho más eficiente en el tratamiento y los cuidados de la gente. Estos fondos van a hacer posible, entre otras cosas, la creación de unas cuatrocientas plazas de profesionales sanitarios que vendrían a descongestionar el sistema y permitirían acabar con las demoras a la hora de ser atendidos en los centros de salud. No podemos dejar pasar la ocasión que se nos brinda para adoptar medidas como las que proponemos desde el PSRM-PSOE.
La pandemia, tristemente, ha demostrado que el actual modelo de residencias de personas mayores y dependientes está siendo ya ineficaz. Por lo que creemos fundamental ir hacia un nuevo sistema centrado en las personas, que priorice las necesidades reales tanto de quienes optan por ir a una residencia como de los que deciden quedarse en casa. Se lo debemos a nuestros mayores.
El modelo que planteamos reproducirá un entorno lo más parecido al hogar: ‘como en casa’ lo llamamos, donde priman las necesidades de las personas residentes que están situadas en el barrio o en el municipio de pertenencia, integrado en su entorno y que recibe la atención sanitaria de su centro de salud, donde el equipo de profesionales es parte del grupo que forma la unidad de convivencia.
Los socialistas creemos que la política está para solucionar los problemas de los vecinos y vecinas, no para crear confrontación. Y en esa línea es en la que seguimos trabajando desde el PSRM-PSOE.