Artículo de Antonio José Caja, concejal del Grupo Municipal Socialista de Alhama, para Infolínea.es
Ya han pasado más de cinco meses desde que se constituyó el nuevo gobierno municipal y todavía no sabemos cuáles son sus planes y proyectos para los vecinos/as de Alhama. Bueno, cinco meses desde que el PP y Alhama@Una firmaron su pacto, hasta ahora secreto, pero el nuevo gobierno se conformó realmente a finales de julio con la entrada de Vox en el mismo. Ahí fue cuando ambas formaciones se quitaron la careta de la moderación que nos habían vendido y mostraron su verdadero carácter extremista.
Esta semana en la que se han celebrado diferentes actos para conmemorar el 25N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, hemos asistido a un hecho insólito. Un partido que forma parte del gobierno local no asiste a los mismos y la alcaldesa guarda silencio. Efectivamente, han sido los concejales de Vox los que han decidido hacer visible su desacuerdo con el mensaje que se traslada a la sociedad para visibilizar esta lacra. Con su ausencia, premeditada, vuelven a mostrar que no creen que exista la violencia machista.
Tampoco creen en el acuerdo ni en el diálogo. La pasada semana se debatieron en las comisiones informativas diferentes puntos del pleno de noviembre. Fueron varias las propuestas de mejora que hicimos en uno de ellos, concretamente en la modificación nº10 de PGMO. Todo fueron buenas palabras pero, en el fondo, con sus acciones, con sus silencios y su cerrojo continuo al acuerdo, demuestran que no respetan la labor de la oposición. Salen de las reuniones con el mismo texto con el que entran sin dar alternativas a la oposición para mejorar los acuerdos con aportaciones, fruto de la experiencia en la gestión de estos últimos años.
Tampoco creen en la participación ciudadana. Lo acaecido en el último pleno es un nuevo capítulo vergonzoso de la historia de nuestro municipio. ¿A quién se le ocurre convocar unas elecciones para elegir a los alcaldes/as pedáneos un lunes? Suena a disparate, pero estas cosas están ocurriendo en Alhama. Y suceden por culpa de la actitud autócrata de una alcaldesa que cree que lo sabe todo y no escucha a nadie. Y también por el silencio cómplice del concejal de Participación Ciudadana, Toni Sibina de Alhama@Una, que lo permite.
Estamos ante un gobierno que no cree en la transparencia. Después de tanto trabajo para lograr posicionar a nuestro Consistorio a la cabeza de las políticas de transparencia y buen gobierno a nivel nacional, en unos pocos meses lo están aniquilando todo. Como decía al principio, los vecinos de Alhama no conocen el programa político de esta alcaldesa y sus concejales. ¿Cuáles son sus objetivos? ¿Cuáles son sus principales políticas para los próximos años? ¿En qué ha consistido el pacto con Alhama@Una, más allá de un puesto a dedo para Isabel Cava? ¿Y Vox, qué ha exigido para entrar en el Ayuntamiento? Es tal el nivel de desidia que si los alhameños acceden en la web municipal todavía aparece el contenido de la pasada legislatura en la que, desde un Gobierno socialista, sí había una hoja de ruta de progreso para nuestro pueblo. Y es que ni creen en la igualdad de oportunidades, ni en la lucha contra la violencia de género, ni en la transparencia, ni en la participación ciudadana… Solo creen en ellos.
