Artículo de María José López Cánovas, concejala de Educación, para Infolínea
Estamos casi terminando el primer trimestre del curso escolar y seguimos con las mismas deficiencias en educación. Hagamos una reflexión sobre la educación en la Región de Murcia, que siempre viene bien. Para comenzar es importante recordar que nuestra Comunidad Autónoma es la única que no ha contratado docentes de refuerzo Covid este curso. Hemos exigido por activa y por pasiva que se reduzcan las ratios en todas las etapas para poder mejorar la calidad en la enseñanza pública y atender con más seguridad las necesidades sanitarias actuales. A pesar de que el Gobierno de España ha enviado en los últimos dos meses 422 millones extraordinarios del fondo Covid, López Miras ha decidido no invertir ni uno solo de esos euros en educación. También es lamentable que sigamos sin conocer el destino de los más de 84 millones de euros que transfirió el Estado a la Región en el pasado curso. ¿En qué se lo han gastado?
En paralelo a esto, la consejera de Educación quiere eliminar el lenguaje inclusivo de los libros de texto, aprovechando la renovación de manuales educativos exigida por la nueva ley de educación, que obliga a adaptar todos los libros de texto de acuerdo al nuevo currículo. Ésta es una tarea que realizan las editoriales ajustándose a los nuevos contenidos marcados por el Ministerio, y que los profesores de cada centro eligen en función de su proyecto educativo.
Los nuevos manuales los utilizarán el próximo curso los alumnos de los cursos pares de primaria, secundaria y bachiller, y al siguiente los impares, de acuerdo con el calendario de aplicación de la LOMLOE.
Según la consejera, “se procurará que sea un lenguaje comprensivo, sin que ese ‘forzamiento’ que se hace para introducir el lenguaje inclusivo perjudique la comprensión de los alumnos”. Esto supondría un retroceso social inadmisible. Esperemos que la comunidad educativa rechace esta propuesta y que defienda la importancia de este lenguaje inclusivo para los escolares.
El nuevo currículo de primaria para los colegios de la Región de Murcia elimina de 1º a 5º la educación en valores cívicos y éticos, que se limitará a impartirse 1,5 horas en 6º curso. Sin embargo, sí tendrán 1,5 horas de religión (igual que ciencias naturales y ciencias sociales) que, al no ser una asignatura obligatoria, los alumnos no tendrán una asignatura espejo si optan por no hacer religión. Entonces, nos preguntamos, ¿qué actividades se van a diseñar para estos alumnos que no dan religión?
Es una verdadera pena que, durante más de 26 años, el Gobierno regional haya provocado que seamos una de las comunidades con mayores tasas de fracaso y abandono escolar, y donde más alumnado repetidor hay. No podemos dar lugar a esto, por eso, de vez en cuando es conveniente hacer este tipo de reflexiones.
